Journaling: qué es, algunas formas y mi experiencia
Muy buenas, mis valientes guerreros. Este artículo llevo intentando escribirlo creo que varios meses (sí, lo sé, es para matarme…), pero me costaba mucho reflexionar sobre este tema y daros mi visión de las cosas. Hoy quiero hablaros del journaling o, como decimos en español, escribir en un diario. Quiero contaros qué es, algunas formas de journaling y que es lo que suelo hacer yo. ¡Vamos allá!
¿Qué es el journaling?
En español, como os decía un poco más arriba, podemos describir el journaling como escribir en un diario. Sí, lo típico que hacíamos de pequeños cuando nos comprábamos un diario y escribíamos en él lo que nos había pasado en un día. Aunque esto es una forma de journaling, no es la única. Hay una entrada que escribí hace poco que también podéis relacionar con el journaling, la escritura terapéutica.
El journaling podemos definirlo como la utilización de la escritura para expresar nuestros sentimientos, reflexionar sobre cuestiones y conservar recuerdos, entre otras muchas cosas. Es una gran herramienta para conocernos mejor, que nos ayuda a materializar aquello que solo está en nuestra cabeza y a conservar nuestros recuerdos, pensamientos y emociones.
No hay una única forma de hacer journaling y tampoco hay forma de hacerlo mal. Siempre y cuando a ti te venga bien lo que haces, estará bien hecho.
Algunas formas de journaling
Ahora vamos a ver algunas formas de hacer journaling que pueden ser interesantes.
Diario tradicional
Esta es la forma más conocida, yo creo, de journaling y que casi todo el mundo ha experimentado alguna vez. Consiste en poner por escrito lo que nos ha ocurrido un día, haciendo balance de los acontecimientos, destacando algunas cosas o escribiendo sobre nuestros sentimientos. Este tipo de journaling suele realizarse por la noche, a modo de caja de recuerdos, para no olvidar lo ocurrido en el día. Esto nos ayuda a estar más presentes a lo largo de la jornada para plasmar en nuestro diario lo acontecido.
Morning pages o páginas matutinas
Este tipo de journaling consiste en escribir tres páginas sobre los pensamientos que nos vayan surgiendo nada más levantarnos. Está bastante de moda últimamente y se ha popularizado gracias al libro de Julia Cameron El camino del artista. Esta forma de journaling nos insta a dejar volar nuestros pensamientos para soltar todo aquello que tenemos dentro cuando todavía no se han activado los filtros y prejuicios de nuestra cabeza. Podemos ver en estas hojas que hay pensamientos que se repiten, llegar a conclusiones profundas o, bueno, cualquier cosa que podamos pensar. Es una manera maravillosa para conocernos mejor.
Cartas
¿Alguna vez os habéis escrito una carta a vuestro yo del futuro o del pasado? Esta es otra forma de journaling. Podemos escribirnos cartas a nosotros mismos o a otras personas (que serán siempre íntimas y no tenemos porqué enseñar a nadie) sobre eventos del pasado o del futuro. Esto puede hacer que nos perdonemos a nosotros mismos o a otros acontecimientos que ocurrieron en el pasado y que todavía nos hacen daño o solemos pensar en ellos de manera recurrente. También sirve para enviarnos mensajes al futuro, para que nuestro yo de dentro de un tiempo tenga un punto de referencia del que sabe que ha partido y que siempre se puede avanzar.
Diario de gratitud
Ya os hablé en otra ocasión del diario de gratitud. Es una de las formas de journaling que yo creo que más nos ayudan a estar presentes. Si hacemos este ejercicio de gratitud sin repetir cosas y reflexionando acerca de lo que estamos agradecidos, podemos encontrar pequeños detalles que son los que nos alegran la vida sin apenas darnos cuenta a veces. ¡Disfruta de las pequeñas cosas!
Scripting
Esta forma de journaling me parece muy poderosa a la hora de imaginarnos cómo queremos que sea nuestro futuroy si realmente nuestros sueños lo son o no. Consiste en describir un día en el futuro. Es decir, es como el diario tradicional, pero de un día que todavía no ha sucedido. Lo que suele ocurrir con este tipo de journaling es que tendemos a describir cómo sería un día ideal para nosotros. Los efectos puede ser realmente interesantes. Os animo a probarlo. Puede que os sorprenda. 😉
Diario visual
Si sois más creativos en el sentido pictórico, quizás os atraiga más tener un diario visual, no solo con escritura, sino también con dibujos, imágenes o fotos. Esto también es journaling, pero de una manera visual. También nos puede servir como álbum de recuerdos. ¿Tienes unas entradas de cine o un trocito de mapa de tu último viaje? Bueno, quizás puedas hacer una bonita página para mantener el recuerdo de ese viaje.
Mi experiencia con el journaling
Hace unos años, empecé a escribir en uno de mis bullet journals acerca de lo que comía y los sentimientos que tenía al respecto. Eso fue un mes antes de comprarme el que ha sido mi compañero inseparable de estos últimos cuatro años. Un día fui a dar una vuelta y un pensamiento recurrente que tenía era que necesitaba ser más paciente. Como quien no quiere la cosa, encontré un diario de cinco años. Este diario tiene un pequeño hueco asignado en cada día para cinco años (podéis verlo en la foto). Desde entonces, salvo un par de días contados, escribo cada noche sobre cómo me ha ido el día. Mi intención con este diario era eso, ser más paciente, dado que tardaría, quisiera o no, cinco años en completarlo. En marzo del año que viene lo terminaré. Ya forma parte de mi rutina y el diario que veis en la foto es el próximo que empezaré. Para mí es muy terapéutico y me hace recordar cosas que, en muchas ocasiones, había olvidado. Es muy interesante volver a leer algunas reflexiones dos o tres años después. Os sorprendería lo que podéis evolucionar.
Otra forma de journaling que forma parte de mi día a día es el diario de gratitud, aunque yo lo hago muy cortito. Cada día escribo algo por lo que estoy agradecida en mi bullet journal. Como os comentaba antes, hay que disfrutar de las pequeñas cosas porque son esas cosas las que al final nos hacen la vida más fácil.
Y la última forma de journaling que también suelo implementar en mi bullet journal es, simplemente, escribir sobre todo aquello que tengo en la cabeza. Como dice mi gran amiga Isa, yo pienso en papel y necesito poner por escrito muchas de las cosas que dan vueltas dentro de mí para poder diseccionarlas mejor. Hay veces que no es nada sencillo poner en papel los pensamientos que tenemos porque es tan grande el caos que tenemos en nuestro cerebro que nos cuesta articularlo de forma lógica, pero es tan útil que al final todo va saliendo. Esto me ayuda mucho cuando estoy estancada con cualquier cosa, cuando no me siento demasiado animada, cuando el mundo se me viene encima o, en fin, mil cosas. Por eso siempre digo que hay que llevar una libreta encima, porque ayuda muchísimo poder poner las cosas por escrito.
Bueno, guerreros, contadme vuestra experiencia. ¿Cómo hacéis vosotros journaling?
Valkyria Kára
¡Bienvenido a mi pequeño rincón, guerrero! Yo soy Valkyria Kára, escritora, desarrolladora web y filóloga hispánica. Mi pasión es y siempre será la escritura, que combino con otros intereses como la programación web (de reciente adquisición), la lectura, la organización, la productividad y el bullet journal. Soy una amante de los animales, de la naturaleza, del té y del chocolate. Aquí dejo mi granito de arena para ayudarte a hacer tu vida un poco mejor.
2 Comentarios
Isa G.
La verdad es que esto de pensar en papel en un cuaderno no deja de ser otra forma de journaling. A veces pongo fecha y me lanzo a escribir algo que se me haya ocurrido. Otras me pongo a divagar de lo que se me ocurra. Otras hago lluvia de ideas. El cuaderno se adapta a mí y a lo que decida que en ese momento necesito.
Un beso.
Valkyria Kára
Sí, es otra forma de journaling. Y lo bueno es que el cuaderno se adapta siempre a lo que necesitemos. Es una de las grandes ventajas del sistema analógico. 🙂
Gracias por comentar.
Un besazo enorme.